Los de Acne underwear no se si fueron muy finos a la hora de elegir su nombre, quizá si; pero nadie puede negarles la capacidad hipnótica de los vídeos promocionales que se curran.
Me he quedado como Renton viendo a los trenes pasar, oigan, cinco minutos embobado mirando a chulos en calzoncillos saltar en una cama elástica. Podría haber llegado el juicio final durante esos preciados 5 minutos, que yo hubiera implosionado en un big bang final sin ni siquiera darme cuenta, tías.
No hay comentarios:
Publicar un comentario